lunes, 2 de noviembre de 2009

Entrevista a Don Lorenzo Serra Ferrer


El mejor entrenador que ha tenido el Betis en toda su historia analiza la actual situación del Betis.


Un Betis desfasado: “El Betis está dejado de la mano. La vida ha cambiado mucho y te puedes quedar atrás, desfasado, sobre todo a nivel deportivo, porque yo no me metía en temas empresariales. Yo daba consejos para estructuras diversas áreas de trabajo. El Betis tiene una dimensión extraordinaria y está desaprovechado”.


Confía en el ascenso: “En el tema deportivo no veo una situación muy preocupante. Creo que tiene plantilla, un respaldo popular muy bueno y, como dije en su día, lo social está muy por encima de lo deportivo y ahora esto se ha agrandado. El Betis tiene un cuerpo técnico que, y hablo por lo que más conozco (entrenador, Merino y colaboradores), conoce la categoría y son profesionales responsables. El inicio de temporada responde al perfil de un equipo que acaba de bajar a Segunda, que requiere una mentalización especial, unos reajustes, pero está bien posicionado. Si llega a ganar el partido suspendido por la gripe A estaría tercero. No creo que tenga problemas en subir a Primera, lo mínimo que se le puede pedir y dar a la afición”.


No hay estructuras: “El problema no es pensar si se va a ganar o cómo en el Carranza. El problema va más allá. Tuvimos la oportunidad de estar entre los mejores y se dejó escapar. Ése es el problema, hacer un club bien estructurado, que vaya más allá del partido a partido o del resultado del domingo”.


Espera un cambio: “Hace cinco temporadas tuve la suerte de colaborar en dejar al Betis cuarto y clasificado para jugar la Champions. Se ha desaprovechado un tiempo magnífico. La manera de dirigir no es la adecuada y hace falta gente con ilusión, conocimientos y voluntad para aguantar el tirón. Pero en esto no puedo entrar”.


Lopera: “Tuve una diferencia de criterio grande con el máximo accionista y propietario del club. Sólo puedo seguir siendo bético, socio y nadie me puede quitar el sentimiento por este club, como profesional y aficionado. No puedo valorar el pensamiento de Lopera”.

Afición: “El bético es muy agradecido, noble y sincero y yo capté eso desde el principio. Tuve suerte de colaborar con un grupo de jugadores y directivos que hicimos historia en el Betis y me enganché. Le estoy muy agradecido al bético”.

Distancia Sevilla/Betis: “Como bético me preocupa, forma parte de la cultura sevillana. No me gusta que el bético esté siempre por debajo a sensaciones. La alegría que suele dar el club, el equipo y los resultados que consiguen. Pero esta distancia no es insalvable. Lo digo con humildad y respeto. Cuando aparecí por primera vez en Sevilla estábamos en esta situación. El Sevilla era muy consolidado, con fichajes relevantes y el Betis en Segunda unos cuantos años. Y esto se cambió en muy poco tiempo. Subimos y el primer año en Primera quedamos terceros, le dimos la vuelta espectacular. Y no sólo fue el primer año, el segundo funcionamos bien y el tercero también. Ya disputábamos títulos. Lo importante es que el Betis se dé cuenta de que tiene que cambiar la manera de dirigir. Tiene que ir más allá de un simple resultado, de si el Sevilla se ha ido. El Sevilla aprendió de las cosas que hicimos en aquellos tiempos y le dio una vuelta a la manera de dirigir y entender un club”.

Cambio: “El entrenador colabora porque es una persona importante en el organigrama, pero a veces no le queda otra que adaptarse a la manera de pensar del máximo responsable, el dueño, el señor Lopera. El beticismo aparte de tener resignación debe tener coraje para dar este paso adelante, de una manera educada, correcta, protestando o discrepando. En el Betis caben todo tipo de personas que pueden ayudar a cambiar la manera que tiene la dirección del Betis, no sólo el entrenador”.

Exigencia: “Hay que ser optimista. Si no volveremos a la improvisación, a la rutina, pero esto no tiene que ser así. Es normal que el bético aspire a algo más”.

Mensaje: “Darle ánimo para que sigan en esa idea noble, de aunar criterios sentimientos, voluntades para que el Betis salga de esta situación sin ir en contra de nada o nadie. Es buscar un Betis mejor, libre”.

Copa: “La Copa era la guinda que le podíamos dar al aficionado bético y que el Betis se situara como lo que es, un club respetado y admirado. La desgracia de esa eliminación tan pronto es un hándicap y eso obliga a dar un poco más cada domingo”.

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